Glassdrive Las Palmas Centro es un taller especializado en la reparación y sustitución de cristales para automóviles, ubicado en la Av. Juan XXIII, 4, Las Palmas de Gran Canaria. Con un horario amplio de atención al cliente de lunes a viernes de 9:00 a 14:00 y de 17:00 a 20:00, este centro se destaca por su profesionalidad y calidad en el servicio.
Con un rating de 2.5 sobre 5, basado en las valoraciones de 10 clientes satisfechos, Glassdrive Las Palmas Centro se posiciona como una de las mejores opciones en Las Palmas para el cuidado de los cristales de tu vehículo. Los usuarios destacan la eficacia en el trabajo, la atención personalizada y la rapidez en las reparaciones.
Los técnicos altamente cualificados de Glassdrive Las Palmas Centro cuentan con la experiencia y los conocimientos necesarios para garantizar un servicio impecable en el cuidado de los cristales de tu coche. Ya sea una pequeña reparación o la sustitución de un parabrisas, en este taller encontrarás la solución que necesitas de manera rápida y eficiente.
Además, la comodidad y la confianza son dos de los pilares fundamentales en el servicio de Glassdrive Las Palmas Centro. Con un trato cercano y amable, los clientes se sienten bien atendidos y seguros de dejar su vehículo en manos de profesionales comprometidos con la satisfacción de sus necesidades.
Si buscas un taller de cristales para automóviles en Las Palmas de Gran Canaria que te ofrezca un servicio de calidad, eficaz y personalizado, Glassdrive Las Palmas Centro es la opción ideal para ti. ¡No dudes en visitarnos y descubrir todo lo que podemos hacer por tu coche!
Profesionales y rápidos. Cumplieron con el horario que me asignaron realizaron un trabajo impecable
Me encanta tanto el servicio como la limpieza
Buen trato
Sólo puedo opinar sobre el servicio que probé.nEl seguro me regaló el servicio de aplicación de un producto en el parabrisas para mejorar la visibilidad bajo la lluvia y acudí a este centro. Me aseguraron unos 3 meses de eficacia. Para lo poco que llueve en esta isla estaba complicado poder comprobar si había funcionado. Pues justo a las dos semanas después llovió un poco y se ha quedado el cristal con las marcas de las gotas de lluvia incrustadas, empeorando la visibilidad. No me parece que el tratamiento haya hecho efecto. Menos mal que fue gratis.
